La evaluación de impacto de la Estrategia Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) presentó resultados que serían la base para el diseño de nuevos lineamientos de política de inclusión financiera en Paraguay.
Entre los puntos desprendidos de de este estudio, resalta que el 32% de los adultos de Paraguay tienen una cuenta en una institución financiera. No obstante, solo el 14% ahorró mediante algún instrumento formal, como una caja de ahorro, cuenta corriente, rueda o tarjeta de débito.
El 19% reportó haber ahorrado en alcancías o debajo del colchón. La tenencia y el uso de cuentas de ahorro formal es menor en áreas rurales.
Con relación a la solicitud de créditos, es mayor la inclinación hacia medios formales con el 26%; mientras de fuentes informales fue el 14%. En este indicador, de nuevo los residentes de áreas urbanas accedieron a los mecanismos de préstamos formales. Aquí también se observa que las mujeres tuvieron un porcentaje mayor en relación los pedidos de préstamos informales, lo que plantea la necesidad de crear productos acordes a las necesidades y posibilidades del público femenino.
En relación a la vulnerabilidad, más de un tercio de los adultos en Paraguay es vulnerable financieramente. En este punto, las mujeres representan el 36%; mientras que los hombres el 32%.
Servicios electrónicos
En el estudio se destaca la penetración de los servicios financieros electrónicos, como las billeteras, transferencias, pagos electrónicos, giros transferencias interbancarias y pagos de servicios por internet.
De acuerdo a los datos de la Encuesta de Medición de Capacidades Financieras (EMCF), el 37% de los adultos paraguayos utilizaron algunos de los instrumentos financieros mencionados.
El estudio
El trabajo, denominado “Conocimientos y Comportamientos Financieros de la Población Paraguaya y Principales Barreras a la Inclusión Financiera” fue desarrollado por expertas internacionales a partir de datos EMCF y de la encuesta del Global Findex, aplicadas en Paraguay durante el 2017 y que tuvo como muestra a 1.000 personas.
Este estudio también analizó las barreras de inclusión financiera, donde se identificaron tres principales por las cuales los adultos no tienen una cuenta en una institución financiera formal: la falta de dinero (68%), el costo del servicio (57%) y por considerar no necesario (43%).
Al informe completo se puede acceder en el sitio web del Ministerio de Hacienda.
